Capítulo 9 Sea engañado y descartado

¿Eh, Samantha? Si la mujer que se acostó en la cama y se divirtió con él fuera Yoyo, definitivamente tendría sexo con ella sin dudarlo.

Era hermosa, delicada y elegante, con una figura curvilínea. Su temperamento era puro y claro. A veces era extremadamente callada y, a veces, era tan gentil como un ángel. Ese tipo de persona era su diosa.

Desafortunadamente, él había estado con ella durante tanto tiempo, pero ella nunca tuvo sexo con él. Siempre hubo una brecha inexplicable entre los dos. Cada vez que quería romper la brecha, se sentía impotente.

Miró a su alrededor y vio la lujosa bañera. Con una sonrisa en su rostro, extendió su mano para tocarla y sonrió. Esta era la vida que quería. Todo tipo de equipo de masaje, baño súper grande y lujoso, ver televisión, escuchar música, etc., podría hacer cualquier cosa en el baño.

Solo el baño era más grande que su sala de estar. ¿Cómo podría no gustarle? Incluso si no le agradaba Samantha, todavía se quedaría con esta mujer, solo para vivir una vida lujosa, tener un trabajo poderoso, meterse en la clase alta y tener una amante ...

La villa donde vivía Samantha fue comprada por sus padres. Estaba ubicado en una ubicación privilegiada, y la decoración y la casa costaban alrededor de un millón de dólares. Chappell había mostrado su amor por esta villa más de una vez, pero Samantha solo sonrió y no tenía la intención de dárselo.

Aunque valía un millón de dólares, su familia era muy rica, ¿no?

Cuando entró al baño, se había quitado el abrigo. Al principio, a Samantha no le importó. Al ver que su teléfono se encendía, sospechó un poco. Ella abrió casualmente su abrigo y sacó su teléfono.

Resultó ser un mensaje publicitario. Cuando estaba a punto de devolverlo, vio a una persona llamada Yoyo.

¿Yoyó?

Un toque de picardía brilló en sus ojos. Ella hizo clic directamente. Efectivamente, era esa perra, yoyo. ¡Inesperadamente, Chappell fue a buscarla hoy!

Ella era solo una mujer hermosa y pobre. ¿Cómo podría compararse con ella?

Poniendo su teléfono en el bolsillo de su abrigo, salió y llamó a su padre con su teléfono.

El padre de Samantha no estaba en una posición alta, pero había estado en una posición alta durante muchos años. Había malversado y aceptado sobornos, y había malversado en forma privada fondos públicos. Había agarrado el mango de muchas personas, lo que provocó que muchas personas se resentieran con él, pero aún así lo escuchaban obedientemente.

Solo podían culparse a sí mismos por haber sido atrapados accidentalmente por el hombre malo como el padre de Samantha.

Después de recibir la noticia de Samantha, su padre, Harris Fang, llamó al gran jefe de la empresa de Yoyo y le pidió al jefe que la despidiera.

Harris Fang adoraba mucho a su única hija. No cabía duda de que su hija acababa de hacerse novio desde que tenía más de 30 años. ¿Cómo podría no darle ningún beneficio? Mientras fuera bueno con su hija, nada sería un problema.

Sabiendo la razón por la que Yoyo vino a su casa, Sheryl tembló de ira. "¿Cómo puede haber un hombre tan malo? Es un idiota ".

Yoyo enarcó las cejas y se sentó tranquilamente en el sofá, bebiendo el refresco de cola comprado por Sheryl, "¿Por qué estás enojado? Todavía no estoy enojado. No vale la pena para ese tipo de hombre ".

Había visto a través de Chappell. Era demasiado codicioso. Quería tener dos mujeres al mismo tiempo, y no pensó en lo que era capaz de hacer.

Si fue Patrick, olvídalo. Había tantas mujeres en una ciudad que querían ser su amante.

Espera, ¿por qué pensaría en ese hombre? Casi la violó y la amenazó.

Aunque él era guapo, ¿era ella una mujer adicta a su apariencia? De Verdad?

"Oye, Yoyo, ¿en qué estás pensando? ¿Por qué sonríes tan extrañamente? ¿Estás pensando en cómo castigar a ese bastardo de Chappell? " Tan pronto como recobró el sentido, vio que Sheryl se acercó a ella y la miró de manera extraña, agitando la mano frente a sus ojos.

"Me gustaría castigarlo. ¿Tiene usted alguna idea?" Yoyo se rió entre dientes y no quiso pensar en Patrick.

"¡Humph, solo quiero matarlo ahora!" Sheryl resopló. ¡La última vez, debería haberle cortado el pene y dejar que no pueda salir a buscar una mujer!

"No seas tan impulsivo. De hecho, podemos empezar por esa amante. ¿No le importaba mucho esa mujer? ¿Virgen? ¡No creo que una anciana de más de 30 años fuera virgen! ¿Por qué no dijo que era monja? " Pensando en esto, Yoyo quería reír. ¡No tenía miedo de tener mala suerte!

Al escuchar esto, Sheryl, que estaba ansiosa por intentarlo, la miró preocupada. "Yoyo, ¿todavía te preocupas por ese idiota?"

Si a ella no le importaba, ¿cómo podría no estar triste y solo querer vengarse de él?

"¿Cómo es eso posible? Ni siquiera quiero ese tipo de idiota ". Dijo Yoyo con firmeza sin parpadear.

Finalmente, Sheryl se sintió aliviada. Ella planeaba encontrar una oportunidad para vengarse de Chappell y Samantha.

"No pensé que Chappell fuera tan malo antes. ¿No se dice que las mujeres adoran el dinero? ¿Los hombres también adoran al dinero? " Sheryl mordió la pajita, parpadeó y miró a Yoyo con amor.

"¿A quién no le gustaría el dinero? Además, mientras duerma con una mujer, puede obtener beneficios y dinero inimaginables. ¿Quién no está dispuesto a hacer eso? " Dijo Yoyo burlándose de sí mismo, sus labios color cereza ligeramente curvados y su expresión estaba algo desconcertada.

Con un chasquido, la Cola que estaba bebiendo Sheryl cayó al suelo. Con cara de enojo, dijo: "¡Ve a la maldita adoración del dinero! De niña, ni siquiera quiero ser una amante. El es un hombre. ¿Cómo puede ser tan desvergonzado? "

De repente, Sheryl miró a Yoyo cuidadosamente y preguntó en voz baja: "Entonces, ¿romperá tu fantasía sobre el amor?"

Aturdido, Yoyo de repente se echó a reír. Ella le frotó la cara y dijo: "¿En qué estás pensando, Sheryl? Es solo un hombre. ¿Cómo pude tener ese sentimiento? Además, el amor es ilusorio ... "

¿Quién podría decir si era cierto o no?

Tenía tantas expectativas antes, pero cuando vio a Chappell y esa extraña mujer teniendo sexo en la cama, sintió que el amor en el mundo era realmente ridículo.

Cuando recordó el pasado, el cálido recuerdo pareció reírse de su inocencia.

Ya no les daría a otros la oportunidad de reírse de ella.

Al escuchar sus palabras, Sheryl estaba más preocupada, pero no sabía qué preguntar. Después de todo, era un asunto privado de su amiga, aunque parecía normal que una amiga cercana tuviera ese problema.

Pero Yoyo estaba triste ahora. ¿Cómo podría frotar sal en su herida?

Después de comer con Sheryl, Yoyo volvió a trabajar pronto. Antes de sentarse en su lugar de trabajo, Larissa He, la secretaria de su jefe, la detuvo.

"Yoyo, Manger Thomas quiere verte." Larissa sonrió gentilmente y parecía una niña amable. No parecía una amante típica en absoluto, ni encantadora ni encantadora.

Incluso sus ojos estaban llorosos como olas de agua. Ella sonrió dulcemente con dos hoyuelos.

No creería que Larissa tuvo una aventura con Thomas si no lo hubiera visto con sus propios ojos. ¿Cómo podía ser una amante?!

Mirando a Larissa He, su mente era complicada, pero no dijo nada. Ella solo asintió y entró a la oficina.

Tan pronto como entró a la oficina, se sorprendió. De repente se le ocurrió que, aunque había ganado el proyecto, cooperó con NK, no le dijo al jefe, y el jefe no le dijo que ella sería completamente responsable de las siguientes cosas.

En la oficina, Thomas estaba sentado en una silla negra, mirando a Yoyo con frialdad. "Sabes lo que has hecho. No diré nada más. Puede escribir su carta de renuncia usted mismo ".

Yoyo arqueó las cejas y se burló, "¿Qué he hecho? ¿Simplemente no le informé del proyecto al jefe? Si le dices, no me dejará irme ".

Hablando de esto, la sonrisa en el rostro de Thomas se profundizó. "Yoyo, esta vez no quiero alejarte. Es la orden del gran jefe ".

La razón por la que Thomas le causó problemas fue que el jefe había acudido a él, pero Yoyo no le había contado nada sobre el proyecto con NK. Además, alguien no quería que Yoyo tuviera una buena vida, por lo que el jefe le pidió que lo manejara solo.

Si no aprovechaba una oportunidad tan buena, sería un tonto.

Siempre había querido sacar a Yoyo de la empresa, ¿no?

- ¿El gran jefe ordenó?

Yoyo frunció el ceño. El jefe definitivamente no era el tipo de persona que le causaba problemas sin razón o incluso la despedía solo porque no le había dicho con anticipación sobre el proyecto.

"¿Alguien le dijo algo al Jefe? De lo contrario, ¿cómo podría despedirme el jefe? " Yoyo golpeó el escritorio, arqueó las cejas y lo miró.

Era la primera vez que veía a Yoyo ser tan dominante. "¿Cómo sé quién es? ¿No sabes lo que has hecho? Piense en a quién ha ofendido antes. No me hagas involucrar. No tengo nada que ver contigo. "

Yoyo era hermoso, pero no todas las flores hermosas eran delicadas. Yoyo era una rosa con espinas. Lo supo después de haber sufrido pérdidas por ella varias veces.

No podía permitirse el lujo de ofenderla.

Por supuesto, la mejor forma era renunciar a ella y no verla nunca, para que él dejara de soñar y no dejara que ella exponga su romance con la secretaria.

Yoyo frunció el ceño y se fue con decisión, "Está bien, escribiré mi renuncia ahora mismo".

No era una persona a la que le gustara acosar, y este trabajo no tenía nada de bueno. Parecía que Dios quería que ella cambiara de trabajo.

Pero ella no sabía quién era el cerebro.

No había ofendido a ninguna gente poderosa recientemente, ¿verdad?

¿Fue Patrick? Pero parecía que el hombre no lo habría hecho en secreto.

Cuando regresó a la casa de Sheryl nuevamente, vio que Sheryl se estaba cambiando de ropa. Cuando vio a Yoyo, preguntó con curiosidad: "¿No vas a trabajar? ¿Por qué volviste? ¿Ha sido despedido? "

Ella solo estaba bromeando. No esperaba que Yoyo asintiera sin dudarlo.

La comisura de su boca se movió levemente. Sheryl estaba medio vestida, con una mano protegiéndose el pecho. Trotó hacia Yoyo, extendió la mano y le pellizcó la cara. "¿Por qué? Cuanto tiempo has estado fuera ¿Por qué te despedirían? ¿Me estás tomando el pelo?"