Capítulo 4 -El punto de vista de Anna

"¿Con quién carajo tuviste sexo, Anna?", me grita mi madre en el momento en que entramos a la casa.

Pamela nos dejó en casa después del silencio que se produjo inmediatamente después de que el médico anunciara la noticia. El silencio se prolongó hasta que llegamos a casa.

Me muerdo el labio inferior en silencio. Me invade el remordimiento. No sé qué decirle a mi madre.

¿Cómo puedo estar embarazada durante tres meses sin saberlo?, me pregunto.

Sé que mi madre está muy decepcionada de mí. "¿No vas a responderme, niña tonta?"

-Mamá, no soy tonta -repliqué enfadada-. ¿Por qué carajo me llamas niña fácil si ni siquiera sabes cómo me quedé embarazada?

-Entonces habla. Tu silencio me está matando. ¿Cómo vas a lidiar con esta mierda y con tus estudios? ¿Así es como te entrené? ¿Por qué demonios te gusta atormentarme?

"Mamá......"

-No me llames. Solo dime quién demonios te metió su semilla, niña ingenua. -Suspiro. Ni siquiera sé qué decirle.

¿Cómo puedo decirle a mi mamá que no lo conozco por su nombre? ¿Cómo le digo que solo conozco al cabrón por su cara?

Estoy jodido, pensé.

De repente, mi madre se queda sin aliento, como si hubiera recordado algo. Estamos en la sala de estar, que tiene dos sofás, un televisor y una mesa de centro. Es una pequeña casa que nos ha mantenido seguros durante años. También es un recordatorio de lo pobre que es mi madre en comparación con mi amiga Pamela, que tiene su propio coche.

-Anna -mi madre levantó la cabeza y me señaló con el dedo índice-. Cameron se fue hace tres meses, ¿no?

Sé de qué está hablando inmediatamente y sacudo la cabeza. Mi madre está pensando que el bebé es de Cameron.

"No es lo que estás pensando, mamá. Cameron y yo nos hemos distanciado durante tres meses antes de separarnos".

Mamá suspira aliviada mientras se deja caer en el sofá más cercano. Odia a Cameron con pasión y estaba en contra de nuestra relación. Cuando rompimos, estaba feliz y aliviada.

-Entonces, ¿quién demonios te dejó embarazada? -Su voz se apaga-. ¿Empezasteis a salir con alguien de nuevo antes de romper?

-No, mamá -respondo con calma.

"Entonces ¿qué pasó?"

"La noche después de que rompimos, ¿recuerdas que Pam y yo fuimos a una fiesta?"

"¿Y te violaron?", supone.

"No, mamá. Fue un consenso entre nosotros. Lo hice porque sentí que Cameron se enteraría y se sentiría mal por eso. Lo hice porque quería fastidiarlo, quería que supiera que otros hombres me encuentran atractiva..."

-¿Y tú, tontamente, tuviste sexo con un hombre? -me interrumpe con un grito. Yo permanezco en silencio-. ¿Y ni siquiera se te ocurrió tomar unas pastillas después del maldito sexo? -su voz tiembla.

"¿Mamá?"

"No me llames. ¿Sabes en qué clase de mierda estamos metidos ahora? ¿Cómo quieres que nos ocupemos de este maldito embarazo tuyo? ¡Dímelo!"

"Lo siento, mamá. No quise que esto pasara", digo y empiezo a sollozar en silencio. Mi madre exhala profundamente y se relaja en el sofá. Está pensando en la salida.

"¿Quién es este maldito hombre?", pregunta finalmente.

Ahora mismo me he quedado sin palabras. Este es otro problema. Sé que esto va a pasar. ¿Cómo le digo que no conozco al hombre que me embarazó?

-Anna, te hice una pregunta, ¿no?

"Mamá, yo...yo...yo no...yo no..."

"¿Hablarás?" Ella corre a su lado.

"No lo conozco", dije de golpe.

"¡¿Qué?!"

-Sí, mamá -sacudo la cabeza varias veces-. Sólo sé cómo es, no sé su nombre ni dónde vive.

"¡¿Qué?!" exclama mamá otra vez.

Corro a mi habitación después de que mamá me golpeara con fuerza en las mejillas. En el momento en que entro a mi habitación, las lágrimas comienzan a rodar por mi rostro. Las dejo caer libremente mientras me desparramó en mi cama.

Soy la perdición.

¿Cómo me las arreglaré en la escuela? ¿Seré el hazmerreír de mis compañeros? Cuando Cameron se entere, ¿cómo se sentirá? Todo esto es lo que me hace llorar aún más.

La bofetada de mi madre es sólo una puerta de entrada a las lágrimas que amenazan con caer desde que el médico nos dio la noticia.

Intento pensar en las posibles maneras de volver a ver al hombre. Apenas lo reconozco y cierro los ojos para verlo y dejar que la imagen se quede en mi cabeza.

Mamá trabaja como camarera en un restaurante. No sé cómo podemos arreglárnoslas con lo poco que gana.

¿Debo abandonar entonces la escuela?, me pregunto.

Mis lágrimas no paran. No tengo nada con qué consolarme. Me siento avergonzada de mí misma en este momento. Después de llorar sin parar durante un rato, me duermo en la cama, sin quitarme el vestido. El golpe en mi puerta me despierta de mi profundo sueño.

"Anna, lo siento. Por favor, abre la puerta", se disculpa mamá desde afuera.

Todavía estoy en la cama, escuchándola. Quiero ir a abrirle la puerta para que entre, pero todavía me duele su comportamiento. Sé que tengo la culpa y no espero que me elogie por mi comportamiento tonto. Lo mínimo que espero de ella es su apoyo. Este es un momento difícil para mí.

"Anna, abre la puerta, por favor. Lo siento. Estaba enojada contigo por..."

"¡Vete, mamá!", grito.

"Anna, por favor escúchame."

"¡Ir!"

No volví a escuchar su voz y unos minutos después, escucho el sonido de sus pies desvaneciéndose. Estoy a punto de volver a dormirme cuando suena mi teléfono. Es Tony. Me doy cuenta de que se supone que debemos salir esta noche.

-Tony, siento no poder ir esta noche. Me disculpo inmediatamente.

-¿Qué? Vamos, Anna. Mis amigos ya están llamando. Les dije que vendrías conmigo.

-Lo sé Tony, pero no puedo, ha surgido algo. Lo siento -murmuro.

-¡Mierda! Deberías haber llamado antes para informarme, Anna. ¿Por qué tienes que esperar a que te llame? -grita.

El Tony que yo conozco es un tipo bueno y agradable, pero el que habla ahora suena egoísta y me molesta.

"¿Sabes lo que pasó? Me desmayé justo después de que nos fuimos y me llevaron de urgencia al hospital. Nunca pensé que fueras tan egoísta".

Estoy enojada con él. Enojada con todos.

"Ana......"

"Cállate la boca y déjame el teléfono", grito y cuelgo molesto.