Capítulo 2 Segundo Mensaje

Nuevo día. Mañana común.

Una alarma molesta haciéndome despertar y un largo día de clases por venir. Di vueltas en mi cama, deseando poder quedarme unos minutos más, aunque tristemente, ya tenía que levantarme, se me estaba haciendo tarde para la escuela.

Llamaron a la puerta. Me moví con rapidez y me acerqué para abrir, seguramente era mamá que venía a levantarme.

Ella es doctora, por lo que suele estar ocupada y rara vez está en la casa. Suele hacer turnos hasta tarde y pasa la mayor parte de su tiempo en el hospital. Aunque no me molestaba, siempre estaba pendiente de mí y pasábamos tiempo juntas cada vez que podía.

- Ami, ¿Aún no estás lista? - Preguntó apurada, mirándome con cara de enojo.

- ¿Acaso no estás viendo? Saco lo que te pondrás hoy. Ve a arreglarte- Continuó en lo que estaba.

Sin duda hacía bien en hacer eso, me hubiera tomado un largo rato elegir qué usar.

Decidí hacerle caso y procedí a entrar al baño. Cepillé mis dientes, lavé mi cara, me puse mis cremas y un poco de maquillaje para tapar imperfecciones.

Al terminar, tomé las prendas que dejó mi madre sobre la cama y rápidamente me vestí. Ella me había sacado unos jeans oscuros y un top azulado que me encantaba. Como calzado decidí usar mis viejos converse.

Miré el reloj y ya eran las 7:40 a.m.

Tenía 20 minutos para llegar, y todavía no había ni desayunado.

Tomé mi teléfono, la mochila y audífonos para luego salir corriendo. Bajé las escaleras en bola de humo, crucé con mamá en la cocina, pero realmente no me detuve a decirle más nada. Agarré el sandwich que ella había preparado para mí, le di una mordida y salí por la puerta.

La escuela quedaba relativamente cerca, usualmente me iba caminando.

Mis audífonos eran esenciales para esta tarea. ¿Se imaginan empezar la mañana sin música? Imposible. Automáticamente se convertiría en un mal día. Busqué entre mis playlists y coloqué la canción What's Up? De 4 Non Blondes. Me pareció la adecuada para empezar este día.

Mientras caminaba no podía evitar pensar en ese extraño mensaje que había recibido la tarde de ayer. Nunca me había pasado algo parecido.

Recibí una notificación que hizo que saliera de mis pensamientos.

Notificación: Nuevo mensaje de Desconocido.


¿Sería la misma persona de ayer?

Le di click al mensaje.

Chat: 


De: Desconocido.

- Hola, extraña.


Recibido a las 7:50 a.m.

¿Tú de nuevo?


Enviado a las 7:51 a.m.

- Así es, no soy de los que se rinden.


Leído a las 7:51 a.m.

Eres como un chicle en el zapato.


Enviado a las 7:52 a.m.

- Honestamente, no lo niego.


Leído a las 7:53 a.m.

Definitivamente voy a bloquearte.


Enviado a las 7:54 a.m.

- Si fuera cierto, ya lo hubieras hecho.


Leído a las 7:55 a.m.

No me provoques.


Enviado a las 7:56 a.m.

- No te atreverías.


Recibido a las 7:56 a.m.

¿Quién se creía este tipo?

Perfecto, hasta aquí.


Enviado a las 7:57 a.m.

- Sé que no lo hiciste.


(Error mensaje no enviado)

Por fin. Al menos ya no tendría que preocuparme por recibir más mensajes de aquel o aquella idiota.

Seguí caminando. Llegué justo a tiempo a la escuela. Fui salvada por la campana.

Este sería un largo día.