Capítulo 7 Impaciencia

Ser paciente no es lo mío, pues me puede la angustia de saber que está pasando, no puedo dejar de recordar el rostro de susto de Tania, tengo la sensación de que mis malestares tienen mucho que ver con ella, pero no sé a la final de que mismo se tratara.

A la final mi amigo estaba de regreso al consultorio, tenia una cara de sorprendido, a la vez una sonrisa de picardía:

-Ya di de una buena vez que averiguaste, quita esa cara, por favor.

-Raúl, eres amargado, así nunca te casaras

-Quien te dijo a ti que a mí me interesa casarme.

-No pues, pensé que algún momento dejarías esa soltería, no sé, formar una familia con una bonita mujer y cosas así.

-Tus sermones ahorita no los necesito, dime que averiguaste de Tania.

-Te diré, pero primero me dices porque razón quieres saber de lo que le sucede.

-(Suspire profundamente) Verás, las cosas se dieron sin que lo buscáramos, resulta que ella y yo nos conocíamos desde pequeños, nuestros padres son muy amigos, resulta que cuando me cambie de ciudad, yo le prometí a ella que volvería siempre a visitarla, pero fue algo que por muchas razones no me fue posible. Creo que fui algo así como su crush, o bueno no sé. Pero el caso es que hace unos meses atrás coincidimos en un bar de la ciudad, y a pesar de no haber tomado tanto, me sentí muy mareado, ella estaba en la misma situación, el problema es que esa noche terminamos juntitos, haciendo de todo hasta que salió el sol. Al siguiente día, teníamos una comida con nuestras familias en la casa de mis padres, la cosa es que ninguno de los dos no alargar las cosas, fue un día tenso, pero no todo termino allí, porque nos quedamos botados de regreso a casa, y nos toco pasar la noche en una posada, no sé si el universo se alineo, y todas las cosas estaban hechas para que pasáramos juntos, y pues volvimos a repetir la del día anterior, como tu sabes que mis estudios decían que yo no puedo tener hijos, no me cuide en ninguna de las dos ocasiones. Pero el caso es que los síntomas, lo que tu me mencionaste me dejaron con dudas, no sé si algo cambio en mi organismo, o es que no podía tener hijos porque la indicada no había llegado, de verdad Luis que no sé que pensar ahora. Así que ahora cuéntame que averiguaste...

-Uy, lo que me cuentas es algo increíble, Jajajajaja... tu el hombre más cuidadoso, no tuvo ni siquiera miedo a alguna enfermedad, no pensando en embarazo claro está.

-Te digo que se me nublo la razón, no se que me dio esa mujer que todo se me olvido.

-Bueno, vamos a creerte

-Ya, dime

-Primero que nada, no puedes decir que yo te dije algo referente a ella por que sino mi mujer me ahorca.

-Lo prometo, palabra de caballero.

-Resulta que Tania hace años recibió un disparo por parte de una mujer dolida, pues el que fue esposo de ella, engaño a otra mujer, y bueno es algo un poco largo, pero ella quedo afectada, pues el tiro daño su matriz, era casi imposible que ella pudiera concebir.

-Que quieres decir con "casi" imposible.

-Mi estimado, Tania esta embarazada de 13 semanas, según me dijo mi esposa, es un milagro que eso este pasando.

-No te lo puedo creer, eso coincide con el tiempo en el que ella y yo estuvimos juntos, pero y si ella también tenia pareja y lo nuestro fue un desliz, ¿Cómo puedo saber? O mejor dicho ¿cómo puedo averiguar si soy capaz de concebir?

-Te haré unos nuevos estudios, un reconteo de esperma y cosas referentes, para saber si algo cambio. Otra idea es averiguar si es que Tania tiene alguna pareja o no, digo se me ocurre, porque de ser el caso que tu situación haya cambiado, existe la posibilidad que sea tuyo. Quien sabe si es que estaban destinados a estar juntos y se les dio el milagro.

-Sabes que soy escéptico, pero quiero empezar por los análisis que me dices. ¿Cuándo empezamos?

-Empezamos mañana mismo, pues hoy te enviare a tomar cierta medicación para hacer mas efectivo el proceso, solo no puedes andar poniendo tu instrumento en nadie, al menos hoy.

-Chistoso, sabes que no tengo pareja, además esa condenada mujer se a adueñado de mi mente, no creo que se me levante el ánimo con ninguna otra.

-Bueno, entonces te espero mañana, para comenzar.

[...]

Tania

Fui a la casa de mis padres, esperar algunos días más para decirles, no estaba en mis libros, así que tomé el primer vuelo y me fui a donde ellos, estaba que no me creía ni yo misma, lo que estaba pasando. Decidí huir, no soy de las que esta donde haya presión y pues no sabía cómo haría si de ser el caso que Raúl se enterara de que estoy embarazada.

A la final, les conté a mis padres todo, ellos tampoco se podían con la felicidad que eso les causaba, los haría abuelos, además era algo que a todos nos resultaba increíble después de lo que me paso, creí que nunca en mi vida podría realizar el sueño de llevar un bebe en mi vientre.

Con mi madre siempre he tenido una confianza extrema, así que le comenté quien era el padre de mi bebe, ella me dijo que, si no me había armado de valor para decírselo, yo le dije que no, por el momento no deseaba confesárselo, es más no creía que lo volvería a ver, en mi caso tenia otros planes por realizar y que seriamos solo mi hijo o hija y yo.

Claro está, que no estuvo de acuerdo con lo que le mencione, pero ni modo, yo estoy lo suficiente grandecita para tomar mis propias decisiones, así que ella solo me dijo, que sea lo que sea que yo tenga en mente me apoyaría, pero que siempre pensara en la posibilidad de que la otra persona merecía saber del bebe.

...................

Me iré de viaje a otro país para poderme alejar de todas las cosas y pensar que hare de ahora en adelante, debía pasar por un chequeo, pues si no lo hago seria inconsciente de mi parte, debo saber que todo esta en orden con el bebe antes de partir, también saber hasta que cosas puedo hacer estando embarazada, nada que afecte de manera negativa, pues la salud de el o ella es importante.

[...]

Raúl

Los nuevos análisis se llevaron a cabo, los nervios no me dejaban en paz, estaba ansioso, intranquilo, pero algo dentro de mí me decía que esta vez los resultados serian diferentes, que quizá esta vez si podía llevar a cabo mi sueño de ser padre.

Mi padre me llamo, haciéndome un sinnúmero de preguntas medio raras, o no se si era por los nervios que tenia encima que no podía dejar de verlas como extrañas, pero, en el momento que él me iba a decir algo, recibí el llamado de Luis, quien era el que me estaba ayudando con los exámenes. Le dije a mi papá que me diera unos minutos que enseguida le devolvía la llamada, quizá haya alguna buena noticia que darle.

Con esas palabras se despidió de mí diciendo que iba a estar al pendiente que le devolviera la llamada.

Entre al consultorio, y ya Luis me tenia toda la documentación, y me pidió que me sentara, cabe recalcar que en la clínica en la que la anterior vez me hice análisis no era esta, así que aquí me toco comenzar desde cero, pero como Luis era mi amigo de muchos años, le tenía confianza.