Capítulo 4 Atrevimiento

2 Días Después: 5:00 P.M.

Estoy muy cansado, no he podido dormir mucho. Siento que mi cabeza da vueltas, estoy muy estresado y cansado. Mamá cada vez está mejor, aunque todavía no puede moverse por sí misma. Últimamente, he tenido muchos pensamientos fuera de lugar con mamá. Sé que no está bien, pero no puedo evitarlo.

12:45 A.M.

Paró de llover, pero el viento afuera golpea con fuerza. El frío es intenso. Mamá se está dando una ducha; durmió toda la tarde y ahora no puede dormir. Dice que quizás duchándose le dará sueño. Momentos después, nos dirigimos a su habitación, pero en el pasillo su toalla se cayó. Ella quedó completamente desnuda. Rápidamente puso uno de sus brazos para cubrir sus enormes senos. La llevé hasta su habitación, luego regresé por la toalla. Fue un momento incómodo.

Luego entré a la habitación. Mamá, nerviosa, me dijo qué ropa le pasaría. Lo hice y la dejé en su cama. Luego salí de la habitación, no cerré la puerta. Salí y me dirigí al baño y me senté en una esquina. Algo en mí no andaba bien. En eso, vi que mamá había dejado sus aretes, así que se los llevé. Antes de llegar a su habitación, me di cuenta de que no había cerrado la puerta.

Me acerqué lentamente y miré cómo se le dificultaba poder cambiarse. En ese momento, la llamé: "Mamá." Ella me miró y me dijo "Hijo," rápidamente se cubrió. Le dije que había olvidado sus aretes en el baño. Entré a su habitación, puse los aretes en una mesa. Ella me miró. Yo sin pensarlo.

Tomé su sujetador y le dije: "Está bien, mamá. Sé que se te dificulta." Ella me miró, y le ayudé a cambiarse. Ella, siempre con mucho cuidado, trataba de taparse. Momentos después, salí de su habitación.

Esta Historia continuará...