Mi Madre, Mi Verdugo
img img Mi Madre, Mi Verdugo img Capítulo 3
4
Capítulo 5 img
Capítulo 6 img
Capítulo 7 img
Capítulo 8 img
Capítulo 9 img
Capítulo 10 img
img
  /  1
img

Capítulo 3

La morgue es un lugar frío, pero el frío que emana de mi madre es aún más intenso.

Se pone sus guantes de látex con una precisión mecánica. Sobre la mesa de metal, mis restos desmembrados esperan.

Ella no me reconoce.

"Víctima femenina, probablemente entre 17 y 20 años", dicta en su grabadora, su voz monótona. "Desnutrición severa y crónica. Múltiples fracturas antiguas mal curadas. Esto no fue rápido".

Con sus pinzas, empieza a reconstruir el rompecabezas de mi cuerpo. Su rostro no muestra nada, ni horror, ni piedad. Solo una concentración absoluta.

"Las articulaciones de los dedos, codos y rodillas presentan múltiples punciones. El agresor utilizó algo pequeño y afilado, consistentemente. Espinas de nopal, quizás. Una tortura lenta, metódica".

Floto sobre ella, gritando en silencio. ¡Soy yo, mamá! ¡Soy Luciana! ¡Mírame!

Pero ella no me ve. Para ella, solo soy el "caso 217", otro cuerpo anónimo en una ciudad que devora a sus hijos.

Observa mis brazos, tan delgados. "La desnutrición es tan severa que ha afectado su desarrollo óseo. Dudo que alguien la haya estado cuidando".

Una ironía cruel. La mujer que me negó la comida durante años ahora analiza los efectos de su propia negligencia como si fuera una evidencia científica.

"Falta la mano izquierda", anota. "Corte limpio en la muñeca. El asesino se la llevó. Un trofeo, tal vez".

Mi mano izquierda. La mano con la que siempre me aferraba al pequeño collar de la Virgen de Guadalupe que papá me regaló antes de morir. Mi único tesoro.

Mi madre termina su análisis preliminar y se quita los guantes. Se frota la cara, cansada. No por el horror del crimen, sino por la interrupción de su noche.

Mira su teléfono y le envía un mensaje a Scarlett.

"¿Estás bien, mi amor? Lamento tanto haberme ido. Mañana te compraré lo que quieras. Te amo".

A mí, la hija de su sangre, me desmembró con su indiferencia mucho antes de que un cuchillo tocara mi piel.

            
            

COPYRIGHT(©) 2022