"Cof, cof", Belen se estaba ahogando. Luchó por respirar, pues parecía que iba a perder el conocimiento en cualquier momento. "No lo sé...".
"¡Dímelo!". Lanny la soltó y tiró de su cabello. "Te subestimé, tuviste el descaro de secuestrar a Jayde".
"¡No lo hice!", dijo Belen mirándolo desafiante. "¡Ah!".
De repente, Lanny la cargó sobre su hombro y salió, cerrando la puerta de un portazo.
Belen fue arrojada al asiento trasero del coche de Lanny, sin saber a dónde iban a ir.
Solo sintió que iban a toda velocidad.
Gradualmente, escuchó el sonido de las olas.
El vasto y oscuro mar se extendía frente ellos, con un enorme crucero brillando en medio de la noche.
Lanny salió del asiento del conductor, sacó a Belen del auto de manera brusca y la arrastró hacia la playa.
"Mamá...". Belen no podía creer lo que veía cuando vio a Ellen allí. Sus manos y pies estaban atados en la cubierta. El rostro de la joven se puso pálido de inmediato.
"¡Mmmph!", gritó la mujer mirando a su hija con impotencia, con la boca tapada con cinta adhesiva.
"Puedes negarte a decirme dónde está Jayde, pero tu madre sufrirá las consecuencias". Con eso, el joven le hizo una señal a sus hombres en la cubierta.
"¡Mmmph!".
Belen abrió los ojos horrorizada mientras su madre era metida en un saco. La parte superior fue atada con una cuerda, y luego fue arrojada al mar, causando enormes olas.
El saco subía y bajaba con el movimiento de la marea, ocasionalmente emergiendo antes de ser engullido por el agua de nuevo.
"¡Lanny, estás perdiendo la cabeza!", dijo Belen agarrándolo del cuello. "La desaparición de Jayde no tiene nada que ver conmigo, mi madre tuvo una cirugía de pulmón, la vas a matar...".
Su voz se apagó, y se ahogó en sollozos.
"¿Ah, sí?", Lanny se burló. "Las dos personas que la secuestraron solían ensayar contigo para los actos de la universidad. El teléfono de Jayde estaba en la tienda de conveniencia, y había mensajes amenazantes tuyos en él".
Con eso, sacó el aparato y mostró la supuesta conversación.
"Solo despertaste su curiosidad. Será mejor que te alejes antes de que las cosas se pongan feas".
"Eres solo una mujer sin recursos. No sueñes con cambiar tu vida seduciéndolo".
"Si no rompes con Lanny, me aseguraré de que desaparezcas para siempre".
"No le envié esos mensajes," dijo Belen entre dientes. "¿Por qué estás tan seguro de que la secuestré? Por favor, te lo ruego. ¡Salva a mi madre!".
Lanny entrecerró los ojos. "Porque sé lo que sientes por mí."
El corazón de Belen dio un vuelco, pues no sabía qué decir.
"Hace tiempo sé que tienes sentimientos por mí. Ahora que amo a otra mujer, la ves como tu enemiga", Lanny dijo con enojo. "Belen, no esperaba que fueras tan mala. Aunque no me enamorara de Jayde, nunca te amaría, deja de fastidiarme. ¡Dime dónde está!".
"¡No lo sé!", Belen gritó. Se estaba derrumbando.
Intentó lanzarse al mar, pero Lanny la atrapó.
"Sigues negándote a decirme la verdad, ¿eh? Bien, entonces tu madre se ahogará en el mar hoy". Con eso, Lanny le dijo a sus hombres: "Corten la cuerda del saco."
"No...", los ojos de Belen se abrieron de terror, y su mente se quedó en blanco.
Quiso detenerlos, pero estaba inmovilizada y no podía moverse.
La cuerda que unía el saco a la cubierta fue cortada, y fue rápidamente engullida por el mar.
"Mamá, mamá...", lágrimas corrían por el rostro de Belen cuando mordió de repente la muñeca de Lanny.
Sintió el sabor de su sangre inmediatamente.
En ese momento, uno de los subordinados de Lanny se acercó. "Señor Lewis, ¡hemos encontrado a la señorita Gilbert!".
Los ojos de Lanny se iluminaron. "¿Dónde está? Llévame ante ella."
En un instante, todos siguieron a Lanny.
Belen corrió hacia el mar y se lanzó al agua helada, ya que era de noche. Sin embargo, nadó con todas sus fuerzas.
No sabía cuánto tiempo había pasado antes de finalmente ver el saco.
Estaba agotada, y sus piernas estaban entumecidas. Finalmente, logró arrastrarlo a la orilla.
"Mamá, por favor. Debes estar bien...". Con manos temblorosas, Belen desató la cuerda y vio el rostro pálido de Ellen, quien estaba inconsciente. No se atrevió a perder el tiempo y llamó a una ambulancia, el cual las llevó al hospital apresuradamente. Belen se quedó aturdida mientras Ellen era llevada a la sala de emergencias.