El Esposo de mi Jefa
img img El Esposo de mi Jefa img Capítulo 7 capitulo
7
Capítulo 9 capitulo img
Capítulo 10 capitulo img
Capítulo 11 capitulo img
Capítulo 12 capitulo img
Capítulo 13 capitulo img
Capítulo 14 capitulo img
Capítulo 15 capitulo img
img
  /  1
img

Capítulo 7 capitulo

Su amiga le indico como servirle el café, pero ella ya se conocía bien como lo solía pedir y acompañado con qué.

-Dios mío, estoy muerta...-vuelve a su silla y justo en ese momento el teléfono comienza a sonar, con manos temblorosas lo descuelga -. Buenos días señor Harper.

-Por favor tráigame un café.

En cuanto ella escucha su voz siente que todos los vellos de su cuerpo se erizan y de inmediato es transportada a tres años atrás... luego de colgar la llamada e ir por el café y las galletas, Ciana iba rogándole a quien sea que pudiera escucharla para que ese hombre no la reconociera.

Al llegar a la puerta de la oficina se tensa tanto que empieza a temblar.

-Por el amor de dios Ciana cálmate, si continuas con estos nervios serás muy evidente ante él. Quizás no te reconoce, son tres años, dudo que se acuerde de las mujeres con las que tiene s3xo.

Ella toca la puerta y de inmediato escucha "adelante" aquello la puso aún más nerviosa, Ciana ingresa en la oficina observando al instante a Phil, por suerte se encontraba cabizbajo observando una pila de documentos.

Ella camina con cautela hacia su escritorio sin apartar la vista de él, al llegar a la mesa hace amago de dejar el café sobre la mesa, pero a raíz de sus nervios consigue derramar un poco sobre la misma que termina humedeciendo algunas hojas.

-¡Dios mío!

-¡Oh, por dios no! -Phil se pone en pie rápidamente con todos los papeles en las manos, observa el desorden en su escritorio y luego ve a su secretaria intentando limpiar con la diminuta servilleta -. Pero, ¿Qué hace? con eso no conseguirá secar todo eso. Vaya al baño y busque una...

En ese instante Phil frunce el ceño ya que esa escena le resulta bastante familiar, luego mira un plato con galletas, las que a él le gustaba mucho. En eso repara en la rubia que parecía no escucharlo.

Su cabello le resultaba conocido, o pudiera ser que fuesen ideas suyas.

-¿Me has escuchado? -habla un poco más bajo, entonces la ve asentir mientras que acomoda la taza de café sobre el plato de cerámica.

La curiosidad fue más grande que llevo al CEO a inclinarse un poco para ver el rostro de esa mujer, y en lo que la vio de perfil Phil ensancha la mirada.

-¿Ciana?

Cuando Ciana escucho que él menciono su nombre sintió un corrientazo en todo su cuerpo, ella que tanto rogo para que no la recordara, y resulta que ni su nombre logro olvidar. Estaba atrapada.

Endereza su cuerpo para enfrentar a Phil.

-¡Ciana!

Phil no daba crédito a lo que sus ojos estaban viendo, la noche anterior la había recordado y ahora ella aparecía como si nada en su propia oficina. ¿Qué significaba eso?, da un paso hacia ella llevado por su instinto.

-Ciana, ¿Cómo es que estas aquí? -ella parpadea ante la pregunta y al mirar nuevamente esos ojos azules siente morirse por dentro.

-Yo, bueno es que yo soy su secretaria.

-¡¿Qué?!

El CEO se impacta por la noticia, ¿Cómo era posible?

-Espera, ¿Qué dijiste?

-Debo limpiar todo esto, disculpe.

Phil la ve caminar hasta el cuarto del baño, debido a su asombro el pelinegro no consiguió moverse de su sitio, pero al verla salir y luego ponerse a limpiar la mesa, él actúa rápido quitándole la toalla húmeda de las manos y la hace verlo.

-¿Cómo es eso de que eres mi secretaria? ¿Desde cuándo lo eres? -Ciana estaba muerta de los nervios, sus pensamientos se encontraban todos revueltos y descontrolados.

-Yo...

-Ciana -Phil observa los labios de ella y recuerda de inmediato esa increíble noche que paso al lado de esa mujer.

-Llevo dos años trabajando aquí.

La respuesta de ella lo trajo de vuelta a la realidad, ¿2 años? y como es que en todo ese tiempo él no se había dado cuenta de que ella siempre estuvo en su empresa.

-Ciana, ¿sabías que era yo el jefe de esta compañía? -ella ensancha la mirada.

-No, no lo sabía. Creí que la señora Mónica...-pero al mencionar ese nombre ambos se pusieron tenso.

De forma inmediata Ciana se aleja de él y es cuando el CEO siente rechazo por parte de ella. A esas alturas ella ya tenía que saber que Mónica era su esposa y no era desde hace poco.

-Yo pensé que su esposa era la dueña de esta compañía, ayer me he enterado que es usted el dueño.

Phil observa como ella seca la mesa rápidamente dejando todo organizado. La mención del nombre de Mónica puso en tensión la conservación, sin embargo, él deseaba hablar un poco más con ella.

-Ciana, necesitamos conversar ¿no lo crees?

-No se preocupe, no tenemos nada que conversar señor Harper -ella hace amago de irse, pero él la sigue y la detiene.

-Claro que necesitamos conversar, es importante -Ciana cada vez se ponía más tensa.

-No tiene que decirme nada, ni yo a usted. ¿Me entiende? Con su permiso.

Su secretaria sale de la oficina dejándolo con más dudas que preguntas, sin embargo, él no se iba a quedar con esa. Relame sus labios puesto que ahora que sabía dónde estaba ella le resultaría más fácil hablar con Ciana.

Al cerrar la puerta Ciana suelta el aliento contenido, cierra los ojos y piensa que quizás las cosas no salieron tan mal. No obstante, el desastre con el café no podía repetirse más, por otro lado, estar cerca de Phil la ponía muy nerviosa.

Todo su cuerpo en esos momentos era como de gelatina, y su corazón parecía que se le iba a salir del pecho.

-Dios mío ayúdame a mantener mis distancias con este hombre.

Y lo imploraba en serio ya que al tenerlo tan cerca revivió todo lo que había hecho esa noche con él y muchas otras cosas más. Era imposible que negara que aún seguía sintiendo atracción por Phil.

-Joder, que idiota soy...

Concentrarse en la información de esos documentos era un verdadero reto para Phil, desde que descubrió que Ciana era su secretaria no dejaba de pensar en ella. Tenía tantas preguntas que hacerle, y estaba plenamente seguro de que ella también deseaba hacerle muchas a él.

            
            

COPYRIGHT(©) 2022