Capítulo 4 Capitulo 4

Ahora que han transcurrido aproximadamente un mes, creo que lo que he comenzado a sentir por aquella idiota a desaparecido por completo de mí cuerpo, aclaré mis pensamientos y ahora sólo puedo ver a SuHee como mí enemiga.

-Yuwon, ¿No vienes?-Preguntó SuHee tímidamente mientras yo evitaba verla a los ojos.

-Enseguida, su alteza.

-Es maravilloso que hayas sido promovido como guardia en mi residencia.

-Para mi es un honor servirle, su alteza.

-YuWon... ¿Porque me has evitado durante todo este tiempo?, esperé cada noche por verte y en ninguna de ellas logré conseguirte y... debo admitir que extrañé permanecer entre tus brazos-Dijo cabizbaja observando hacia sus manos-Quería permanecer contigo y aún así... tu solo te alejaste de mí cuando fuiste tú quien tomó la iniciativa de besarme.

-Lo sé, y lo lamento, Alteza.

-Ahora me llamas Alteza, cuando solías llamarme SuHee. Sabes perfectamente que me gustas y aún así tu solo te has atrevido a ignorarme a pesar de haber puesto este sentimiento en mí, ¿Acaso sabes cuando doloroso ha sido para mi? -.Dijo intentando verme a los ojos, pero evite hacerlo, ya que sabía que volvería a caer en ella.-¿Siempre has sido tan tímido?, Me gustaría que habláramos más entre nosotros... Pensé conocerte, pero veo que me he equivocado... ¿No significo nada para tí?

-L-lo lamento su alteza.-Respondí rápidamente observandolas a los ojos lo cual pareció frustrar a SuHee quien hizo un chasquido con su lengua y sujetó mis manos.

Fue muy imprudente de mi parte el haber besado a esta mujer cuando solo quería saber que ocurría con las marcas en sus muñecas, pero sin darme cuenta terminé más cerca de ella de lo que pensé; le permití incluso dormir en mis brazos incluso los días en los cuales solía llorar sin decirme que le ocurría. Pero todo eso creó una gran confusión en mí, hasta el punto en que sentía que la necesitaba y que no podía dejarla lejos de mí ni un segundo más, incluso cuando intenté mantenerme lejos de ella deseé poder verla y besar sus labios nuevamente.

Pero ahora lo sé, ella vivió de buena manera y creció siendo una mujer saludable, mientras que mí hijo y hermana no tuvieron la oportunidad de poder hacerlo, también mí sobrino que se encontraba en el vientre de mi hermana, ellos no le permitieron ni tan siquiera nacer.

Por lo tanto, SuHee es mí enemiga, ya que poseé la sangre de Soon.

-¡Vamos YuWon!, Mi padre vendrá en unos minutos-Exclamó tomando mi mano y entrelazó sus dedos con los míos.

Comprimí mi ira al sentir su despreciable toque en mi mano lo cual hacía que quisiera acabar con su vida rapidamente; al fin y al cabo es una perra sangre sucia que pagará por los actos de su padre.

-Le seguiré su alteza.

Caminé siguiendo a la estúpida niña ante mí la cual caminaba alegremente mientras llevaba consigo un hanbok de color rosa brillante y continuó hasta llegar a su padre y soltó mis manos antes de llegar; aquel maldito hombre que tanto deseo asesinar.

-Oh mi querida SuHee-Dijo con alegría sosteniendo a su hija en sus brazos-Yuwon, ¿Has ido a los entrenamientos?-Me preguntó.

-Lo he hecho su majestad.

-Entonces, estará mi hija segura en este castillo-.Rió.

-Por supuesto, su majestad.

-Ven conmigo YuWon, necesito mostrarte algo. SuHee, ve con las damas y quédate en tu habitación.

-Está bien, padre.

Observé cómo SuHee se alejaba e inmediatamente el rey Soon comenzó a hablar.

-Queria decirte que serás promovido para una misión dentro de tres días.-Sonrió-Iras en compañía de varios soldados.

-Lamento mi insolencia al contradecirlo su majestad. Pero no soy un soldado para este tipo de trabajos.

-Eres uno de los que mejores que se ha desenvolvido en el castillo, por lo tanto te estoy ordenando que hagas tu maldito trabajo si no quieres que te asesine.-Ordenó arrugando su expresión.

Tch, este maldito arrebiate cree que puede asesinarme fácilmente.

-¿De qué se trata su majestad?

-Llevamos mucho tiempo en la búsqueda de una gema de color negro... Es una gema preciosa la cual es muy poderosa. Esa gema puede convertir a cualquier humano en un poderoso ser, por lo tanto la he estado buscando...

Oh... Se refiere a la gema negra que comí aquel día cuando mi felicidad fue arrebatada por sus malditas órdenes. Esa gema fue heredada de mis padres quienes alegaban que esta era un preciado tesoro de la familia y que contenía un gran poder, el cual solamente podía despertar su verdadero dueño. Por lo tanto fue entregado a sus decendientes... Uno a uno hasta llegar a mis manos.

Mis padres no mentian sobre la gema, ni tampoco se trataba de un simple cuento fantasioso como solíamos pensar mí hermana y yo.

-Hace 20 años atrás, llegó a nuestros oídos que un joven campesino poseía esa valiosa gema. Pero al llegar allí nunca conseguimos nada, por lo tanto tuvimos que acabar con sus vidas.-Rió y apreté mis puños con fuerza al escucharlo hablar con un tono de gracia sobre el asesinato de mi familia.

-Está bien señor, estaré listo para lo que me pide

-Me alegro que sea así, Yu Won. Ahora lárgate de mi vista.

Hice una reverencia y me alejé de el; esperaré ancioso por verlo derrotado... Acabaré con el y con su maldito reinado y me quedaré con todo lo que le pertenece, haré de la gente de este castillo un gran banquete para los cerdos.

Mí ira crecía a cada segundo a pesar de haber transcurrido varias horas, las palabras de Soon recorrían mí cabeza y hacían que mis recuerdos dolorosos volvieran a mí. Intenté mantener la calma, hasta que finalmente llegó la noche y me alejé lo suficiente al sentir la presencia de mí familiar Yuroh.

-Mi señor-.Colocó su mano en su pecho e hizo una reverencia-He venido a informarle sobre los movimientos de los soldados enviados por el rey Soon.

-Habla.

-Ha enviado a un grupo de soldados a destruir una aldea de humanos; acabó con todos solo por placer, ya que no tenía motivo alguno para hacerlo, alegó que habían robado sus bienes cuando esas personas eran inocentes.

-Ya veo, descuida...

-¿Se encuentra bien señor? -.Me preguntó a lo que asentí con mí cabeza-Mi señor, ¿Cómo continuará con esto?

-¿Acaso no lo ves?, He ocultado mi apariencia demoníaca. Por lo tanto me encargaré de esto pronto...Un día más... solo uno.... no quiero tardar más de lo esperado, por lo tanto quiero acabar con ellos de una buena maldita vez-Dije con furia, al recordar las palabras de Soon.

-¿Un dia?-Me preguntó-No es mucho tiempo, pero estamos listo para atacar, solo esperamos su orden, señor.

-En un día atacaremos, asegúrate de informarles a mi ejército... Te invocaré ¿Entendido?

-Sí, mi señor.-Afirmó para luego desaparecer ante mis ojos siendo desvanecido por la oscura y densa neblina que rodeó su cuerpo.

-¡Yu won!-.Exclamó una voz femenina la cual reconocí rapidamente, así que cerré mis ojos con molestia al sentir su presencia-¿Qué haces aquí?.

-Solo me gusta observar las estrellas, su alteza. Me hace recordar Buenos momentos.

-Oh... ¿Buenos recuerdos?... ¿Se trata de nosotros? -.Me preguntó mientras reía bajo.

-Como le he dicho, su alteza, me gusta observar las estrellas.

Un largo silencio se hizo presente en el ambiente. quizás en parte sea cierto que tengo Buenos recuerdos al observar las estrellas, pero por otra parte, suelo ir todas las noches a este lugar para recibir los informes de mis soldados.

-YuWon... Quiero decirte algo-.Susurró tomando mi mano.

-¿Qué sucede, su alteza?

-Queria decirte que me gustas-.Sonrió.

-Ya me lo había dicho antes, Alteza.

-¿Que hay de tí?... ¿Te gusto?