/0/4480/coverbig.jpg?v=91a652374ed19e1482d2b9ef5c08dc92)
Deimon.
Mi corazón iba a tres mil kilómetros por hora, quería que esto fuera tan solo una pesadilla. Todavía no puede ser cierto que el padre de Lusiana me esté llamando para saber de mi hija.
-Señor, me parece que está equivocado.- tengo que ser fuerte, por mucho dinero que el tenga no me voy a dejar amedrentar tan fácil.- Para recuperar a s