el amor y el sexo
img img el amor y el sexo img Capítulo 4 Miedo
4
Capítulo 6 Volviendo a casa img
Capítulo 7 Amigo img
Capítulo 8 Para ti img
Capítulo 9 Incluso img
Capítulo 10 Nueva vida img
Capítulo 11 Aquí conmigo img
Capítulo 12 Amor y dolor img
Capítulo 13 Primer paso img
Capítulo 14 Piel contra piel img
Capítulo 15 Dolor y amor img
Capítulo 16 Momento feliz img
Capítulo 17 Mano traviesa img
Capítulo 18 Día soleado img
Capítulo 19 Adopción img
Capítulo 20 Algo extraño img
Capítulo 21 Tiene que parar img
Capítulo 22 Sufrimiento img
Capítulo 23 Esperando img
Capítulo 24 Todo se está desmoronando... img
Capítulo 25 Sin ella, sin nada... img
Capítulo 26 Perdido img
Capítulo 27 Inferno img
Capítulo 28 Rana, rana y gusano img
Capítulo 29 Ayuda especial img
Capítulo 30 La audiencia img
Capítulo 31 Sin fuerzas img
Capítulo 32 Buscando fuerza img
Capítulo 33 Quiero ver a Melissa img
img
  /  1
img

Capítulo 4 Miedo

Capítulo 4 - Miedo

NARRA CIÓN DE LARISSA

ACHERON PELIGROSO

PELIGROSOS NACIONALES

Apenas abrazo a Melissa, el Dr. Aguiar me saca de

de vuelta a mi habitación.

Todo el camino solo pude pensar en lo dulce

niñita. En el brillo de tus ojos, incluso antes

de tan ingrata enfermedad. ¿Cómo puede ella todavía

sonreír en medio de esta batalla contra la muerte?

Entramos a mi habitación y cuando envuelve su

brazos a mi alrededor, mis miedos surgen en mi pecho.

En el futuro seré como Melissa. Sin mi

cabello, teniendo días difíciles y sin saber si tendré el

mañana. Las lágrimas comienzan a fuir y

No puedo detener el hipo.

El Dr. Aguiar me envuelve aún más en sus brazos y

dejándome en su regazo, se sienta en la cama.

Sé que esto está mal, pero necesito sentirme tan mal

a salvo. Sorprendentemente tus brazos

siento como una fortaleza a mi alrededor.

- Es tan injusto que estos niños pasen por esto.

susurro acurrucado en su pecho.

- Yo ya dije. Solo la gente fuerte pasa

todo eso.

ACHERON PELIGROSO

PELIGROSOS NACIONALES

Levanto mi rostro y por primera vez me enfrento a tu

ojos.

- No tendré fuerzas para todo esto.

Digo perdido en tu mirada.

Tu mano llega a mi rostro y con calma tu

los dedos limpian mis lágrimas.

- ¡Él va que sí! Estaré aquí a tu lado. Lo haremos

pasarlo juntos.

Tus palabras tocan mi corazón de una manera.

extraño. Acelera los latidos y algo se quema

dentro de él

Tus ojos bajan a mi boca y tu mano

está en la parte de atrás de mi cuello. Tu aliento golpea mi

cara y cierro los ojos. Por alguna extraña razón,

un sentimiento de que me vas a besar crece dentro

yo.

Su mano sube a mi cabello y siento el calor de

cierra tu boca. No puedo abrir los ojos.

Tengo miedo de abrirlo y dejará de besarme. EL

El ruido de la puerta abriéndose nos asusta y siento tu

girar la cara. abro los ojos y lo veo

ACHERON PELIGROSO

PELIGROSOS NACIONALES

mirando a la puerta.

- ¿Esta todo bien?

Es la voz de mi madre.

Me mira y una sonrisa torcida y sexy estalla en su rostro.

labios.

- Me llevé a la Sra. Martins para dar una vuelta.

- Larisa...

le susurro.

- Llámame Larisa.

Entonces tu sonrisa se ensancha.

- No le gusta la Sra. Martins? a menudo llamo

mis pacientes por apellido.

Niego con la cabeza.

- Parece el nombre de una señora de ochenta años.

ACHERON PELIGROSO

PELIGROSOS NACIONALES

Me río de una manera divertida y me doy cuenta de que todavía est

en tu regazo.

Darse cuenta de que todavía estamos muy cerca. Yo

Se levanta y se da la vuelta para ponerme en la cama.

Veo a mi madre ir al baño. Se inclina y

susurra en mi oído.

- Larisa...

Todo mi cuerpo se estremece.

- Que tengas buenos sueños.

Besa mi frente y me deja en la habitación con una

enorme sonrisa idiota.

¿Lo que acaba de suceder? me muerdo el labio,

sabiendo exactamente lo que pasó aquí.

Eso fue un pequeño juego de seducción y lo disfruté. me gustó

mucho.

Creo que nunca tuve eso con José.

una pareja seca sin juegos.

Me acomodo más en la cama. que hago con mi

¿La vida con José?

Si pasas por todo esto y vuelves a mi vida

ACHERON PELIGROSO

PELIGROSOS NACIONALES

normal, aún se guardará en mí tu

rechazo.

No sé si puedo superar esto y casarme con él.

Cierro los ojos y suspiro.

Pero ahora no es el momento de pensar en lo mío.

futuro. Ha llegado el momento de decidir qué hacer con

mi presente, con mi enfermedad. la puerta de

se abre el baño y sale mi madre con la nariz

Rojo.

- ¿Qué paso?

- Nada.

Dice con una débil sonrisa.

- Mamá, no me mientas.

Ven caminando a mi lado.

- Sólo problemas burocráticos.

Yo sostengo tu mano.

- Cuéntame.

ACHERON PELIGROSO

PELIGROSOS NACIONALES

Ella suspira, pero antes de que pueda hablar, suena su teléfono celu

- ¡Hola!

Responde rápidamente, evadiendo nuestra conversación.

- Está justo a mi lado.

Cierra los ojos.

- ¡Correcto!

¡

Extender el teléfono.

- Su padre.

Respiro hondo y cojo el teléfono.

- ¡¡¡Hola papá!!!

- ¿Cómo estás candidiasis?

Abro una gran sonrisa. me gusta cuando el

llámame por mi apodo.

ACHERON PELIGROSO

PELIGROSOS NACIONALES

Papá siempre dice que cuando nací, tuve

enormes ojos que le recordaban a las ranas.

- ¡Estoy bien!

- Es una mentira.

Dice suspirando.

- No es fácil aceptar una enfermedad así, padre.

- Lo sé... Quiero gritarle a Dios.

- No haga eso. Todavía lo necesitaré en caso

hay una posibilidad de curación.

- Me voy a São Paulo ahora de madrugada.

- No es necesario, padre.

- Necesito que sí. Mi tordo está enfermo y lo necesita.

de mí.

- Solo ten cuidado con el viaje.

ACHERON PELIGROSO

PELIGROSOS NACIONALES

- Puede dejar. Ahora toca el bar de tu madre.

Empiezo a reír.

- ¡Te amo papá!

- ¡Yo también te amo, hija!

Mi mamá levanta el teléfono y se aleja de mí.

Intenta hablar en voz baja, impidiéndome escuchar.

Algo salió mal. Puedo sentir que te tensas y

asustado.

Camina escuchando a mi padre.

- Cuando llegue, lo resolveremos.

Cuelga y vuelve a mi lado.

- Dime qué está pasando.

Su mano pasa por mi cara.

- Tu pacto.

- ¿Qué pasa con mi acuerdo?

ACHERON PELIGROSO

PELIGROSOS NACIONALES

Ella suspira y me mira.

- ¿Cubren tratamiento pero no hospitalización?

- ¿Como asi?

Pregunto tratando de sentarme.

- Larissa se calma.

- ¿Cómo puedo calmarme? La hospitalización de la madre no

parte del tratamiento.

- Yo se.

Sus ojos se llenan de lágrimas.

- El costo de la hospitalización es alto.

Cierro los ojos molesto.

- Con lo que tenemos en el banco podríamos

Solo paga un mes aquí.

ACHERON PELIGROSO

PELIGROSOS NACIONALES

- No...

digo frme.

- No utilizaremos nuestro dinero para

lo soportaremos

- Podemos vender nuestra casa.

La miro sorprendida.

- ¿Y tú dónde vivirás cuando todo esto termine?

Yo sostengo tu mano.

- Si muero, quiero que aún tengas tu casa y

ese dinero mamá. no puedo dejarlo ir

todo para mi

Ella comienza a llorar.

- ¿De qué me servirá todo esto sin ti?

Dice sollozando y me abraza.

Tu grito es como puñaladas en mi pecho.

ACHERON PELIGROSO

PELIGROSOS NACIONALES

- Prométeme que no tocarás tu casa ni

en nuestro dinero.

- Larisa...

La tengo en mis brazos.

- No puedo prometer.

- Entonces no aceptaré el tratamiento.

- No haga eso.

Pregunta enterrando su rostro en mi cuello.

- Necesitas este tratamiento.

- Entonces prométemelo.

Tu silencio es una tortura.

- Prométemelo mamá.

- Yo prometo.

ACHERON PELIGROSO

PELIGROSOS NACIONALES

Mi cuerpo se relaja con alivio. no puedo dejarla

perderlo todo, por algo que ni siquiera sé si me curará.

Ella se aparta y se seca los ojos.

- Acuéstate y duerme.

Dice besando mi frente.

- Pronto llegará tu padre y la paz desaparecerá.

Empiezo a reírme en su cara.

- Tu paz desaparecerá.

- Sí...

Voltear los ojos.

- ¡Amo a tu hija!

- ¡Yo también te amo, mamá!

Me acomodo en la cama y cierro los ojos.

Ella comienza a alisar mi cabello, como cuando

ACHERON PELIGROSO

PELIGROSOS NACIONALES

era niño

Mi cuerpo se va relajando y poco a poco se va el sueño

Apareciendo.

- "Dios... no te lleves a mi angelito.

mendigar. Sálvala de esta enfermedad. si me necesitas

toma, sino que viva y construya su familia. ¿Está por ahí?

merece ser feliz. Merece vivir".

Siento tus labios mojados en mi frente y luego

me doy a dormir.

ACHERON PELIGROSO

PELIGROSOS NACIONALES

            
            

COPYRIGHT(©) 2022