Capítulo 7 Capitulo 7

Era casi sábado, faltaban unos minutos nomas para que sea el cumpleaños y la transformación de Katia, estábamos reunidos con las chicas y los papas de ella para ver su transformación y como sería su loba. A los pocos minutos una luz la comenzó a rodear completamente, Kati se tiro al piso gritando y cerrando los ojos por el dolor que estaba sintiendo. Yo pude ver y oír como sus huesos crujían y cambiaban, voltee mi mirada y tape mis oídos sin querer ver o escuchar eso, me recordaba a mi transformación lo que me causaba escalofrios en todo el cuerpo al recordar el dolor.

Cuando los gritos dejaron de escucharse volví a mirar viendo una loba intentando reincorporarse, hasta que logro pararse dejando a la vista su hermoso pelaje Marrón oscuro y blanco, ella aulló hacia la luna, salto de la roca en la que estaba y camino hacia sus padres, los cuales la felicitaban y abrazaban.Todos nos transformamos empezando a correr por el bosque a su lado, al aprecer esto era una tradición, me habia contado que estaba en su familia desde décadas, en la cual sus padres y gente muy cercana a ella debían correr a su lado. Cuando por fin frenamos fue que sentí un olor a pasto y miel entrar a mis fosas nasales, el cual me atraía demasiado.

-Mate-dijo Cía

-¿Está aquí? - pregunte curiosa.

Mi padre me había contado de ellos, los mates, las parejas predestinadas o media naranja, eran las almas gemelas de cada ser sobrenatural. Ellos tenían un lazo muy fuerte y ellos decidían si romperlo, rechazando a su mate, o fortalecerlo, amando a la otra parte.

Al parecer no había un tiempo concreto para encontrar tu mate, hay gente que tiene la suerte de encontrarlo a los pocos días o meses de haberse transformado, como tambien hay gente que tarda años en encontrarlos y algunos casos en los que nunca se encuentran. El lazo que hay entre ellos es tan fuerte que puedes sentir sus emociones, sus dolores, si estan inquietos o tranquilos. Desde que mi padre me conto sobre los mates me causo mucha curiosidad como sería el mio, y saber que ya lo habia encontrado me ponia un poco nerviosa.

-Sí, búscalo Celes, ¡ahora! - gritó Cía en mi mente.

Mire a mis amigas por un momento para despues empezar a correr por el bosque, siguiendo el rastro del olor, hasta que sin darme cuenta choqué con algo, o mejor dicho alguien. Cuando me reincorpore pude ver al frente mío Un lobo con un pelaje completamente gris con partes de su cuello y pecho blanco. Era mi Mate.

-Hola -Dije nerviosa, sin obtener respuesta alguna- ¿Quién sos? - Pregunte.

-Tendrás que averiguarlo sola-dijo el lobo con un gruñido, para después salir corriendo, intente seguirlo, pero era más rápido que yo y además no conocía esta parte del bosque y no quería perderme así que frene de a poco, dejándolo ir, esa vos me era demasiado familiar ¿Quién era él?

Volví Un poco decepcionada con las chicas.

-Celeste acá estas! ¿Dónde fuiste? - Dijo Alay preocupada por el link, todas aun transformadas en lobas.

-Encontré a mi mate, pero el salió corriendo así que no sé quién es, pero no se preocupen ya lo voy a averiguar.

-Yo... Hablando de mates, yo también lo encontré- Dijo Alay, todas nos quedamos mirándola expectantes- Es Sebas, el amigo de Celes.

Mentiría si dijera que estaba sorprendida, Todas la felicitamos y seguimos charlando de otras cosas hasta que nos tuvimos que volver cada una a su manada.

~*~

Era lunes, ya estaba en el colegio con las chicas y con Sebas como de costumbre, todo parecía un día normal, hasta que sentí ese olor a pasto y miel de vuelta, era mi mate. Les dije a las chicas que ya volvía y empecé a buscarlo sin encontrarlo. Cuando ya me había rendido y me di vuelta fue que lo vi ahí, mirándome fijamente sin decir nada a pocos centímetros de mi cara, mire a mi alrededor dándome cuenta que estábamos solos, lo volví a mirar esta vez a sus ojos fijamente.

-Hola Aiden, así que vos sos mi mate- Dije un poco nerviosa desviando mi mirada al ver que no despegaba su vista de mis ojos.

-Así parece, es por eso que vengo a decirte esto "Yo Aiden Willderru rechazó a Celeste Wolfstorn como mi mate y futura luna de la manada Luna Renaciente"-dijo con una sonrisa socarrona.

Con un nudo en mi garganta y una punzada en mi corazón, volví a mirarlo a los ojos fijamente, estaba dolida, pero no iba a demostrarlo, él no era el único Alpha acá.

-"Yo Celeste Wolfstorn aceptó el rechazo de Aiden Willderru como maté y como futura luna de la manada Luna Renaciente"-Dije seria, sin despegar nuestras miradas.

Pude notar como el apretaba con fuerza sus puños hasta que sus nudillos se pusieron blancos, él simplemente me miro con furia en sus ojos y se fue. Contagiándome el enojo, yo debería ser la que está enojada cuando él fue el que me rechazo a mí, pude oír como mi loba aullaba de dolor en mi interior. Escuche el timbre del colegio y fui al curso haciendo como si nada hubiese pasado.

Cuando las clases terminaron me dirigí con Sebas a la manada, al llegar nos encontramos en el camino con Fran, ellos me acompañaron a casa y yo subí a mi habitación y me tiré a la cama mientras lloraba de la bronca que sentía en mi interior, lloraba con fuerza por la impotencia que sentía y seguí llorando hasta que sentí unos golpes en la puerta. Me senté en la cama y me limpie como pude las lágrimas, me acerque a la puerta de mi cuarto y la abrí viendo a Fran frente a mí, él al verme en ese estado me abrazo, sintiendo sus cálidos brazos rodear mi espalda, sintiéndome de alguna manera protegida.

-¿Mejor? - Pregunto en un susurro, a lo que yo asentí- ¿Queres contarme lo que paso? podes descargarte conmigo- Dijo apoyando su cabeza en la mía sin separarse de mí.

-No quiero molestarte con mis problemas- Dije sorbiendo por mi nariz.

-No lo haces- Me dio un beso en la frente y se separó de mi- Vamos a la cocina, nos preparó un té a cada uno y me contas ¿sí? - Asentí y fuimos a la cocina.

Él se quedó conmigo toda la tarde haciendo que me olvidara del idiota de Aiden, cuando oscureció él me dijo que era hora de irse, acompañándolo hasta la puerta.

-Gracias por lo de hoy Fran- dije sonriéndole.

-No me agradezcas, cuando te vi me di cuenta enseguida que te pasaba algo, y cuando entraste a tu casa le pregunté a Sebas que había pasado, él me dijo que no sabía, pero que no estabas bien, a la vez también sabía que tus papas hoy no iban a estar en casa y no quería que estés sola. Así que no me agradezcas, para eso estamos los amigos- Me sonrio a lo que yo lo imite- Nos vemos Celes, dormí bien- Dijo dándome un beso en la mejilla y yéndose.

Cerré la puerta y me apoyé en está cerrando los ojos suspirando, este habia sido un día con muchas emociones.