/0/16465/coverbig.jpg?v=25dd953d7cfd010d163859ae7136d6fd)
Mientras estaba en el auto con Ethan y Nikolay, me había puesto a pensar en los dos años que Dahia desperdicio, como me hubiera gustado ser yo la que se casará con él, no me importa si tiene dinero o no, una vida sencilla es todo lo que he querido en la vida.
Mientras voy a mi país, todo lo malo se me olvida, por eso el día de su matrimonio, decidí irme, mi padre y madre estuvieron de acuerdo con mi decisión. No soy de ocultarles nada a mis padres más, estos me apoyan siempre y cuando no sea algo de gravedad.
Ethan Smith, a sus ahora treinta y cinco años, es un hombre fuerte, cabello castaño, ojos oscuros, con un poco de barba en su rostro, siempre está callado y nunca lo había visto mostrar tal temperamento como hasta ahora.
Aunque él no lo sepa, puedo ver el rastro de decepción en su mirada, es todo lo opuesto a mí.
Siempre he estado enamorada de él, desde que lo conocí hace tres años, desde que pretendía a mi hermanastra, yo misma sabía que no tenía chance con él.
No hasta ahora, pero sé que las posibilidades son nulas. Ethan Smith nunca se fijaría en mí.
- ¿Por qué estás tan callada?- su pregunta me hizo volver a la realidad, una realidad, donde se está por divorciar Pero eso no quiere decir que tenga oportunidad con él.
-¡Oh! Solo pensando en el trabajo de mañana- exclamé un poco resulta, tampoco es que vaya a dejar ver mis emociones a este punto, no puedo ser tan tonta.
Lo vi, suspirar y cerrar sus ojos por un momento, nuevamente los abrió y me volvió a mirar, mientras ponía sus manos sobre su regazo.
- Lo siento por haber hecho que vinieran tan de repente, pero lo que estoy por pedirte es algo sumamente urgente Emily, espero que lo entiendas y me puedas ayudar- me quedé pensado en sus palabras, y creo que pudo ver mi cara de confusión, por qué volvió a decir.
- Les he mentido, y sé que ahora después de lo que te diré tendrás toda la razón para odiarme, pero quiero que me entiendas, y que tampoco digas nada de lo que te diré.- Volvió a decir Ethan, mientras ahora también miraba a Nikolay, quien le dio un asentimiento de cabeza, para confirmar que lo estaba apoyando en lo que me tendría que contar.
-Yo no estoy entendiendo nada Ethan, ¿Qué tengo que saber y por qué me dices esto a mí?- Dije un poco confundida, las emociones ahora las tenía a flor de piel, por la espera de lo que el hombre sentado al lado mío tendría que decirme.
- Es un poco difícil -lo vi soltar de repente y luego pasar sus manos por su cabello, que antes estaba bien peinado, ahora estaba por los mechones en varios lugares, cosa que lo hizo ver más sexy de lo que es.
- Emily, soy un hombre rico, o se podría decir, para resumirlo.
Les hice creer a ustedes que era un hombre de campo que no sabía nada de los negocios, pero es mentira, cuando conocí a Dahia me enamore perdidamente de ella, había venido a esta ciudad por negocios cuando las conocí saliendo de la universidad.- puedo asegurar que sentí mi corazón partirse en varios pedazos, el sudor frío me recorrió la nuca al procesar la magnitud de la información que me estaba diciendo Ethan.
- estaba aburrido de que todas las chicas solo vinieran a mí por mi dinero, así que lo más creíble que se me ocurrió fue mentir, decir que venía del campo, que trabajaba en una finca que tendría que ir tres veces por semana. Todo era mentira, hoy justo hoy iba a decirle a Dahia toda la verdad. Pero no pensé, nunca pensé encontrarme con ella engañándome.
Todo lo que Ethan me estaba diciendo mientras apretaba sus manos, y su respiración se volviera errática parecía un cuento, todo había sido mentira, pero hasta ahora él tiene algo de razón.
Dahia nunca se hubiera quedado con los brazos cruzados ni lo hubiera ignorado como tantas veces lo hizo, si hubiera sabido que Ethan tenía dinero, estaría disfrutándolo, gastándolo y haciendo alarde de ello con todas sus amigas, quisiera ser el centro de atención ella nadie es más vanidosa que ella.
- Por favor continúa- le respondí mientras veía que se había quedado callado observando mi rostro.
-Hoy es el aniversario de la empresa que mis padres fundaron, y como el dueño que soy ahora, habría una celebración donde darían a conocer mi posición, nunca permití que se divulgara más de lo permitido hacia mi persona, por lo que poco vas a encontrar noticias mías o alguna foto de mi rostro, quienes me conocen solo es por qué me han visto en fiestas de gala, pero nunca una foto.
Decía Ethan con gran seriedad mientras me miraba fijamente a los ojos.
- Hoy quería presentar a Dahia oficialmente como mi esposa, pero como vez ya no puede ser posible, es allí donde entras tú en todo esto Emily, necesito tu ayuda y es urgente.- otra vez lo quedé mirando con cara de estúpida, pues no entendía que tenía que ver yo en todo esto.
- ¿Por qué yo, que es lo que necesitas de mí?- tuve el valor de decir mientras mi corazonada pedía a gritos que no fuera lo que estaba pensando. Él no me podía pedir algo así.
- Necesito que te hagas pasar por mi esposa, sé que todo en centro mediático estará encima de nosotros, pero no tengo más solución en estos momentos. Te necesito Emily- allí fue justo en ese momento donde mi corazón dolió y dejé de sentir mis latidos por unos minutos, por qué sabía que solo sería utilizada, pero sí eso es para poder estar un poco de tiempo con Ethan. Lo tomaría sin pensar en lo que pudiera pasar, no me importaba, solo sería por un tiempo, luego simplemente me iría a mi país y no volvería a saber más nada de él.
Lo noté nervioso, mientras aún seguía pensando en sus palabras y en la oferta que me estaba brindando, mi amor por él me hacía sentir estúpida y masoquista, pero solo un poco, solo un poco de tiempo con él sería suficiente para estar feliz. Lo amo claro que lo hago, pero después de esto, sabía que tendría que rendirme, su amor nunca sería para mí, solo iba a seguir sufriendo por mi amor imposible y no correspondido.