Capítulo 5

Cuando Patrick despertó de nuevo, estaba en una cama limpia. La herida en su pecho estaba vendada. Scarlett estaba sentada a su lado.

"¿Qué pasó?", preguntó él, su voz ronca.

"Te desmayaste por la pérdida de sangre", dijo ella con calma. "Te di un poco de la mía. Es una vieja costumbre familiar para emergencias".

Era una mentira tan obvia que Patrick casi se ríe. Pero estaba demasiado débil.

"Máximo... ¿está bien?", preguntó, probándola.

"Sí, está bien. Estaba muy asustado. Por eso te empujó. No fue su intención".

Patrick la miró. Ella lo creía de verdad, o quería creerlo.

"Moriría por usted, señora", dijo Patrick. Las palabras salieron por costumbre.

Scarlett malinterpretó su lealtad. Sus ojos se suavizaron.

"Lo sé, Patrick. Lo sé".

Se inclinó y le acarició la mejilla.

"Quédate a mi lado para siempre, Patrick. Te necesito".

Por un momento, pareció vulnerable, casi sincera. Pero luego se enderezó, su máscara de frialdad volvió a su lugar.

"Descansa. Te recuperarás pronto".

Se fue.

Días después, para celebrar la "valentía" de Máximo durante el ataque, Scarlett organizó una gran fiesta.

"Pide lo que quieras, mi amor", le dijo Scarlett a Máximo delante de todos los invitados. "Cualquier cosa".

Máximo sonrió, sus ojos brillando con malicia mientras miraba a Patrick, que estaba de pie en un rincón.

"Quiero a tu perro faldero", dijo Máximo. "Hay una mujer, la viuda del último hombre que mató. Es una mujer salvaje. Quiero dárselo a ella por una noche. Para que se desahogue".

La sala quedó en silencio. Scarlett dudó, una sombra de conflicto cruzó su rostro. Pero la mirada suplicante de Máximo ganó.

"Está bien", dijo ella en voz baja. "Es tuyo".

La viuda, una mujer corpulenta y de aspecto rudo, fue traída. Miró a Patrick con odio puro.

"Antes de que te lo lleves", dijo Scarlett, "bebe una copa de vino conmigo. Para celebrar".

Le ofreció una copa a la viuda. La mujer la bebió de un trago. Un momento después, se atragantó, su rostro se puso azul y cayó al suelo, muerta. Envenenada.

El caos estalló.