/0/3108/coverbig.jpg?v=511a06280d13685834cd4012e00c1928)
Dante se relaja, pone las manos detrás de la cabeza y pregunta si él también puede demorar en dar una respuesta. Eva sonríe, haciéndole creer que si, pero se pone seria nuevamente y le
dice que no, solo ella podía hacerlo.
-Dame tu respuesta ahora, si no me voy. -dice ella, y hace el gesto de levantarse.
-Vale, vale, acepto, yo no soy celoso así