Capítulo 38 Abrázame

EL QUE NO QUISO LUCHAR FUI YO.

Capítulo 38

Sentía sus cálidos brazos acunarme como a un niño pequeño, su cálido aliento acariciaba mi rostro, su respiración se estabilizó. Me aferré a ella, no quería soltarla, quería detener el tiempo ahí en ese momento.

No quería ser fuerte, me dejé caer, quería llorar hasta sentir que mi piel se secaba. Qu

            
            

COPYRIGHT(©) 2022