Amatista descansaba en la habitación de Enzo, alejada del bullicio y la tensión que dominaba la mansión. Después del incidente en el campo, se había refugiado en la tranquilidad de esa habitación, que, aunque todavía le resultaba ajena, poco a poco comenzaba a sentirse más como un refugio. Enzo había insistido en que descansara, asegurándole que se
COPYRIGHT(©) 2022